27 de Noviembre. Tokio se convierte en la capital de Japón
El 27 de Noviembre de 1868 la ciudad de Edo pasó a llamarse Tokio, que en japonés significa ciudad del este. De este modo se convierte definitivamente en la capital de Japón después de que el emperador Meiji se traslade a vivir a esta ciudad desde Kioto.
Contexto histórico de Tokio
El futuro emperador Meiji nació el 3 de Noviembre de 1852 en Kioto. En esta época Japón se encontraba aislado, no había sido industrializado y aún era feudal. El pais estaba bajo el dominio del shogunato Tokugawa y los daimyō, los señores feudales, que controlaban los más de 250 dominios descentralizados del país.
Meiji comienza su reinado el 3 de Febrero de 1867, dando pie a la restauración que lleva su nombre. Todo comenzó con la abolición del shogunato Tokugawa y los privilegios feudales. Así, se pasa un sistema de prefecturas. Seguidamente, el emperador declaró la conversión de Japón a un estado de democracia similar a los de occidente. Además, Edo pasa a llamarse Tokio transformándose en la capital del imperio unificado y residencia del emperador.
El poder pasó de los Tokugawa a los que ayudaron a la restauración, los daimyō y samuráis, los cuales ocuparon puestos en el gobierno y en el ejército.
Gracias al proceso de restauración y modernización, Japón se convirtió en un potencia industrial. Las principales medidas que contribuyeron a ello fueron:
- La implantación de un nuevo sistema de estudios en 1872.
- La institución del senado en 1875.
- La inauguración de la asamblea nacional en 1890.
- La anexión de Corea en 1910.
Japón consolidó su desarrollo político y económico, y consiguió destacarse como potencia en oriente después de la estancia de mas 40 años en el trono del emperador Meiji, por lo que este ha pasado a tener lugar destacado en la épica historia del pais del sol naciente.